Precauciones con los tabiques de fincas antiguas

En varias ocaciones nos hemos encontrado con una situación peculiar, que parece algunos albañiles desconocen, cuando han de proceder a demoler tabiques  de  5 cm de espesor, generalmente en fincas antiguas.

Generalmente, todos los profesionales de la construcción sabemos que a la hopra de demoler tabiques para redistribuir espacios de locales o viviendas, hay que tener especial cuidado con los que tienen un espesor de 15 cm o más, pues este espesor implica que son de carga y su demolición sin contar con medidas de apuntalamiento preventivas, puede dar lugar  a muchos problemas estructurales.

No obstante hay que destacar que los de menor espesor, en ocasiones y concretamente en las situaciones  en las que se encuentren en locales o viviendas de fincas antiguas, hay que poner especial cuidado en el forjado de estas construcciones, sobre todo cuando estan realizados con revolton cerámico y vigas de madera.

Esto se debe a que antaño, casi todos los tabiques de las viviendas, a excepción de las dependencias destinadas a cocinas o servicios higiénicos (que eran algo mas gruesos), eran de 4 o 5 cm de espesor y como estos no son de 15 cm, hay «albañiles» que en obras donde, ya sea por ahorrarse costes o por qué la propiedad no considere necesaria la intervención de un técnico, al ver que hay tabiques de 5 cm de espesor, empieza a demoler sin reparar en el forjado de la finca, ya  que con el paso del tiempo, las vigas de madera realizan un esfuerzo denominado «entrada en carga», por lo que los tabiques de la vivienda o local, en su conjunto , soportan la carga superior que las vigas les aportan y cuando este apoyo es demolido, los resultados pueden llegar a ser catastróficos.

En lenguaje práctico sería como por un lado coger un vaso de agua y ponerlo encima de una carta (naipes) colocada esta de canto. Obviamente el vaso pesa más que el naipe y este cede. En cambio si creamos una estancia de 4 cartas verticales del mismo espesor y encima le ponemos el mismo vaso de agua, este se soporta. Cuando uno ( o varios) de esos apoyos, se quita de su lugar…el vaso cede.

Así, que cuidado con estas cosas, pues hay ciertos temas que son de sentido común, aparte de, como no, qué siempre es importante disponer de conocimientos técnicos y de buena construcción, para dar un buen servicio al cliente.